Todas las mujeres enfrentan la amenaza de desarrollar cáncer de mama, ya que es el TIPO DE CÁNCER MÁS COMÚN que afecta a las mujeres en todo el mundo. Aunque no podemos eliminar el riesgo de cáncer completamente, podemos reducir el riesgo de desarrollarlo adoptando un nuevo ESTILO DE VIDA SALUDABLE. Conversamos con un profesional de la salud para conocer los 5 mejores hábitos para disminuir las posibilidades de tener el gran C y nos comentó lo siguiente:
1. ¡Actividad física regular!
No es ningún secreto que realizar actividad física con regularidad ofrece un sinnúmero de beneficios para nuestro cuerpo. Estos pueden variar desde la liberación de endorfinas para nuestra salud mental, hasta el aumento de nuestros niveles de aptitud cardiovascular. Muchos estudios demostraron que hacer ejercicio con regularidad puede reducir el riesgo de cáncer, ya que disminuye los niveles de estrógeno (una hormona que aumenta el riesgo de cáncer de mama) en el cuerpo, reduce la inflamación y el estrés oxidativo y favorece nuestra función inmune en general. Se recomienda realizar al menos 30 minutos de ejercicio 5 veces a la semana como medida para reducir el riesgo de cáncer. Sin embargo, si no te entusiasma demasiado ir al gimnasio, puedes hacer ejercicio de otras maneras, como realizando tareas de jardinería, hacer una caminata rápida o usando las escaleras cada vez que puedas
2. Come bien, vive bien
Todos conocemos el viejo dicho de que los cuerpos se hacen en la cocina. Y es verdad. No solo el 80 % de nuestro cuerpo depende de nuestra dieta, sino que también los alimentos que consumimos pueden disminuir o aumentar el riesgo de cáncer. Llevar una dieta baja en grasas y rica en vitaminas, minerales, vegetales crucíferos y fibra no solo reduce el porcentaje de grasa de tu cuerpo, lo que, en consecuencia, disminuye la exposición al estrógeno, sino que también le proporciona al cuerpo nutrientes para combatir el cáncer. Pero eso no es todo. ¿Sabías que se ha demostrado que las vitaminas D y E, que se encuentran en los vegetales de hoja verde y el aceite de pescado, reducen el crecimiento de las células cancerígenas?
3. Obtén tus imágenes.
Cuando hablamos de imágenes, no nos referimos a que mires Netflix o tu programa de cocina favorito. En realidad, nos referimos a que obtengas imágenes de diagnóstico a través de un autoexamen o escaneos clínicos mamarios. Esto es particularmente importante si tienes un riesgo alto de cáncer de mama o si tienes más de 40 años. Se sabe que los senos de cada mujer son diferentes. Algunos pueden tener nódulos de manera natural, mientras que otros no y, por lo tanto, siempre es importante conocer la apariencia y tacto normal de tus mamas y de los tejidos de tus axilas. La hinchazón, los nódulos mamarios, los hoyuelos, la secreción del pezón, la comezón o el sarpullido persistentes y los cambios en el tamaño de la mama son síntomas comunes del cáncer de mama que pueden detectarse por medio de un autoexamen mamario. ¡La detección temprana del cáncer de mama puede aumentar la tasa de supervivencia de 5 años un 90%!
4. Conoce los factores de riesgo:
Los factores de riesgo del cáncer de mama incluyen lo siguiente:
- genes: el cáncer no corre en la familia. Sin embargo, las mujeres con los genes BRCA 1 Y BRCA 2 tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama.
- Alcohol: algunos disfrutamos de una o dos copas. Sin embargo, el riesgo de desarrollar cáncer de mama aumenta aproximadamente un 10 % por cada bebida alcohólica consumida cada día.
- Tejido mamario denso: las mamas que tienen tejido mamario denso (más granular y con menos tejido adiposo) tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama. Pero eso no es todo. Una alta densidad mamaria también puede causar pruebas de mamografía falsas o negativas.
- Exposición al estrógeno: se ha vinculado el hecho de comenzar la menstruación antes de los 12 años con un mayor riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer de mama, ya que aumenta el tiempo de exposición al estrógeno.
- Haber tenido cáncer de mama o un nódulo mamario benigno: aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de mama.
- Fumar: fumar no solo afecta a nuestra salud pulmonar y oral, sino que se ha demostrado que existe una relación entre fumar tabaco y el cáncer de mama.
5. Maternidad
¡Alabada sea la maternidad! Las investigaciones han demostrado que traer un niño a este mundo no solo nos brinda un amor incondicional (¡y la habilidad de funcionar con muy pocas horas de sueño!), sino también que el embarazo, en particular antes de los 30 años, puede reducir el riesgo de cáncer de mama un 50%. Pero eso no es todo. Las investigaciones también han confirmado que optar por la lactancia materna durante 6 a 12 meses puede estabilizar las células dentro del tejido mamario y reducir los niveles de estrógeno, lo que, en consecuencia, también funciona como una estrategia de reducción de riesgo. Aún si eso no es suficiente, las investigaciones también sugieren que la lactancia materna reduce no solo nuestro riesgo de cáncer, ¡sino también el de nuestro hijo lactante!